El diapasón de una guitarra clásica mide unos 440 mm. Para medir con precisión la posición de los trastes, disponemos de calibres.
Un pié de rey de 700 mm no permite precisar más allá de 2 a 5 centésimas.
Disponemos de la posición teórica de los trastes con precisiones muy superiores. Ardua tarea llevarla al mástil.
Aún siendo muy estable el ébano modifica sus cotas con la humedad ambiente.
El coeficiente de contracción tangencial unitaria del ébano africano (Diospyros crassiflora) es de 0,30. Un diapasón que en estado anhidro midiera 440,00 mm, crecería 5 mm si la humedad de la madera se incrementara en un 4% (0,30=100.Lh-L0/4.Lh).
Los mejores altavoces nunca obtendrán buena calidad de sonido con un equipo de música mediocre.
La construcción del diapasón, las distancias y calidad de trastes, cejilla y selleta así como la de las cuerdas, son absolutamente criticas, Es difícil comprender por qué no se insiste más en este hecho perfectamente demostrable experimentalmente.
Incrustar en la madera trastes fijos de metal resistente a la oxidación, parece una elección mejor que utilizar cuerda de tripa atada al mástil, como se muestra en el laúd de la fotografía de portada.
En contrapartida, perdemos la posibilidad de ajustar su posición, apareciendo graves inconvenientes que no podemos ignorar.
Pulsemos al aire, una a una, las 6 cuerdas de nuestra guitarra española.
Una de ellas suena más fuerte que las restantes.
Substituyendo esa cuerda por otras de menor tensión y calibre, sea cual sea el fabricante, mantiene su prevalencia.
Probablemente la frecuencia de resonancia de la tapa armónica y el resonador que constituye la caja, tenga un valor próximo a la de esta nota más sonora. Un home estudio permite visualizarla en nuestro ordenador. Coincide con la frecuencia medible al dar golpecitos en el fondo de la guitarra.
Después de no pocos esfuerzos, podemos haber encontrado experimentalmente, que la mejor combinación de cuerdas para potenciar las características peculiares de nuestra guitarra es la siguiente:
Cuerda 1 -Mi Savarez New cristal 501 CJ
Cuerda 2- Si, Savarez Alliance 542R
Cuerda 3- Sol Savarez Alliance 543 R
Cuerda 4 - Re Savarez Cantiga 514J
Cuerda 5- La, Savarez Corum 505 R
Cuerda 6- Mi, Savarez Cantiga 516J
Ver el artículo de Junio de 2015 "Combinando cuerdas"y el de Septiembre de 2014, "Tres guitarras, tres voces: el efecto de las cuerdas"
Por una lado cumplen la condición de una baja dispersión del calibre, medido con resolución de milésimas de milímetro con un palmer, a lo largo de toda su longitud y perímetro.
Una dispersión de 38 micras genera armónicos con una desviación de frecuencia entre 5 y 19 cents.
El oído humano entrenado es capaz de discriminar dos notas separadas 4 cents.
Para revisar la definición de esta unidad logarítmica de variación de la frecuencia basta leer la entrada dle 17 de octubre de 2015, "Por debajo de 1 cent ¿qué significa?"
Hablamos de inarmonicidad causada por la calidad de una cuerda comercializada.
El sonido mágico de la guitarra depende de la nitidez de la nota pulsada (por ejemplo La de 110 Hz) y la intensidad y exactitud de los armónicos o múltiplos que siempre se solapan, (220, 330, 440, 550, 660Hz... en lugar de 222, 333, 442, que obtendríamos con cuerdas menos uniformes).
Por otro, las diferentes tensiones de afinación de cada cuerda permiten obtener bajos y agudos de nivel sonoro más equilibrado. Indicar que la frecuencia de resonancia de esta guitarra es de 118 Hz, muy próxima a la frecuencia de la nota La de la quinta cuerda al aire.
Las cuerdas originales que montó el fabricante de esta guitarra fueron Savarez Alliance HT 540J, con bajos y agudos de alta tensión.
La selleta tiene un cierto grado de inclinación sobre el puente que supone una compensación de inarmonicidad (producida al pulsar y acortar la cuerda y a la rigidez natural del nylón), que el fabricante ha fijado para este juego de cuerdas. (En la imagen, nueva selleta compensadas, de mayor grosor, ajustada por su base a la ranura original)
Una ventaja muy poco divulgada de las cuerdas de fluoruro de polivinilideno (PVDF) como las Alliance, es que requieren una compensación mucho menor para lograr el tono correcto, al recorrer traste a traste la totalidad del diapasón.
Un cambio radical de cuerdas como el anterior se traduce en una perdida grave de armonicidad.
La primera cuerda (Mi de 329,628Hz) pulsada apretándola contra el primer traste, suena con una cierta desviación respecto al Fa (349,228 Hz), detectable con un afinador estroboscópico de 0,1 cents de resolución. Con suerte el traste 12 puede aparecer afinado.
Repetido para las 6 cuerdas elegidas, solo la 2ª y 3ª cuerdas (ambas Alliance, aunque de baja tensión) aparecen aceptablemente "quintadas".
Debemos corregir la compensación modificando o fabricando una cejilla y selleta adecuada a nuestra nueva selección de cuerdas.
Hemos construido y ensayado durante un año, diferentes modificaciones hasta concluir en la sellleta 7, basada en la original. En posteriores operaciones hemos podido bajar algo más su altura sin que aparecieran problemas de trasteo. lo que ha permitido mayor comodidad en la mano izquierda.
En la fotografía la cejilla de origen y la nueva identificada con el nº 2. Pueden apreciarse las correcciones para las cuerdas 1, 4, 5 y 6. Las cuerdas 2 y 3 son de fluorocarbono y no requieren nueva compensación.
Los elementos de medida que nos permitirán el ajuste, son los siguientes:
Para poder llevar a cabo las correcciones en la selleta, hemos tenido que tallarla con mayor grosor y ajustar su base para que encaje en las ranura del puente original.
Estos prototipos nº2 y 7 se han hecho artesanalmente pero la idea es utilizar medios precisos para su mecanización exacta.
La corrección del punto de arranque de la cuerda desde la selleta corrige la rigidez intrínseca de la cuerda
Dos cotas de la cejilla tienen un efecto importante. La altura de la base de la ranura, de ajuste de la cuerda, al diapasón afecta a la acción de la guitarra, y permite bajar la altura de la selleta sin que trasteen las cuerdas más elásticas o aquellas que coinciden con la frecuencia de resonancia.
Adelantar o atrasar el punto de contacto con la cuerda al aire, influye en la afinación en cada traste.
La tensión de afinación de la cuerda sonando al aire se ve ligeramente modificada al pulsar la cuerda . Es función directa de la longitud de la cuerda y su variación es matemáticamente calculable.
El resultado conseguido con la nueva selleta y cejuela adaptadas al juego combinado de cuerdas, muestra un incremento del nivel sonoro de la guitarra, una afinación mucho más exacta en cada traste de cada una de las cuerdas y un efecto de resonancia por simpatía entre cuerdas muy agradable. Los armónicos son muchos y más audibles.
Más adelante mostraremos los cálculos en los que nos basamos y un método para un mecanizado del hueso con precisión de 0,05 mm.
me encanta¡¡
ResponderEliminarMuy interesante
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